-Una cata de Anchoas en casa-

Si quieres que tus amigos conozcan tu faceta de catador de anchoas profesional... elige la anchoa que para nosotros sería la mejor, la Anchoa del Cantábrico y les dejaras con la boca abierta, vamos con unas pequeñas "pistas"...

"A la anchoa ni pan" 

Cumpliendo con el dicho, tienes que hacer la cata sin ningún otro alimento que pueda desvirtuar el sabor y el olor

1. escoge para su presentación un plato blanco plano que ayude a resaltar únicamente la anchoa
2. invita a tus amigos a observar los filetes, cuéntales que deben ser del mismo tamaño y con forma de anchoa, es decir, sin puntas rotas o muy recortadas
3. coge una de las anchoas con un tenedor y observar que se doblará un poco, por que la textura de la anchoa es consistente y carnosa, ni blanda ni demasiado tersa
4. deja de nuevo la anchoa en el plato y explícales que su aspecto debe de ser limpio, no se debe apreciar ninguna espina, libre de manchas, con un color uniforme marrón rojizo intenso, sin vetas de sangre
5. déjales observar la espina central desdibujada como prueba del producto fresco que estáis catando
6. como ultima pista ¿a qué os huele? ¿a olor fresco? ¿a mar? ¿a salazón? eso es lo perfecto, nunca la buena anchoa olerá a pescado

Ahora llega el momento de probarlas... ¡aprovecha para lucirte!

Lo primero tenéis que notar en boca un sabor intenso, salado en un principio y que se va diluyendo... con un suave regusto a mar que no se va fácilmente, y que engancha, que te incita a comerte otra... eso es así, por que ha tenido un proceso de salazón auténtico...

Te garantizamos que tus amigos se las comerán como si fuesen pipas